Tengo una amiga del alma que se llama Celia.
Perth 28 de mayo del 2024 Tengo una amiga del alma que se llama Celia. Nos conocimos hace muchos años atrás, las dos buscábamos sentirnos bien en nuestras propias vidas, necesitábamos vernos tal cual éramos, reconocer las herramientas que teníamos para utilizarlas en nuestro camino, aprender nuevas, sentirnos queridas, completas, valiosas. Yo tenia unos 26 o 27 años, Celia andaba por sus 50. Estábamos en etapas diferentes de la vida, pero en etapas parecidas en cuanto a lo que buscábamos a nivel personal, a ese reencuentro que necesitábamos con nosotras mismas. Ella, madre de tres varones, divorciada, afrontando la vida como madre sola, después de haber apostado en algún momento a esa idea tan fuerte de familia, hasta que la muerte nos separe. Yo, un poco menos perdida que hacía un par de años atrás, lanzada a una relación que luego se terminaría a las puertas de dar el “sí, quiero” y con la triste realidad de estar presenciando como se apagaba la vida de mi mamá como consecuen...