La Tía Ñeca.
Maisons Laffitte, 25 de agosto del 2023
Mi Tía Ñeca, hoy me estoy acordando mucho de ella.
La Tía Ñeca, un apodo que viene de Muñeca
, ha sido una de las personas más cariñosas de mi vida.
De esas mujeres que no podian quedarse quietas, siempre haciendo algo, sobre todo limpiando (a veces sobre limpio
), siempre atenta a ofrecer lo que uno justo estaba esperando.
Mi mamá nos llevaba seguido a la casa del Tío Luis, su hermano, y la Tía Ñeca que era su esposa.
Era ir a un hogar donde todo funcionaba, donde daba gusto estar, donde queríamos quedarnos y no tener que volver a la porquería donde vivíamos, tanto en lo referido a lo precario de nuestra casa como a lo insalubre del ambiente familiar 
.
Recuerdo que mamá nos decía a Ale y a mí, "si la Tía les ofrece algo ustedes dicen: no, gracias". 


Nosotros estábamos esperando el momento en el que ella nos ofrecía el clásico mate cocido con leche.


Era una delicia



.
Cuando ella decía la famosa frase, Ale y yo nos mirábamos, cómplices, con la mirada nos decíamos todo, pero no soltábamos ninguna palabra.


Mi Tía tomaba ese silencio como un SI, y nos servía la taza de mate cocido con leche, a la que le ponía el azúcar como a ella le gustaba.
Ale y yo disfrutábamos de ese manjar, acompañado de algún coquito.



Hoy me encantaría volver a estar sentada alrededor de esa mesa, con la taza de mate cocido, escuchando las historias del Tío Luis y viendo a mi Tía ir y venir, acomodando cosas, a veces retando a su marido, pero hasta eso nos daba felicidad.


.

Comentarios
Publicar un comentario